Uno de los libros que me gustó más el año pasado fue la colección de relatos La Vieja Sangre, de Alfredo Álamo. Me encantó su originalidad y me fascinó como gestiona la convivencia en un escenario de fantasía urbana oscura de personajes conocedores de la mitología y los ritos necesarios para tratar con seres sobrenaturales y personas normales que son incapaces de notar ni de ver los extraños poderes que les rodean. Decidí que era mejor no hacer una reseña al uso, sino una entrevista al escritor para que pudiera explicar a los lectores del blog este fantástico universo.
Cuando me enteré de que Alfredo publicaba una nueva novela corta ubicada en este escenario, la compré sin pensármelo dos veces. After Punk es una lectura independiente, ya que la acción es anterior a los hechos narrados en La Vieja Sangre, pero comparte filosofía, escenario y algunos personajes. Mi opinión es que se puede disfrutar sin conocer las historias previas, pero haberlas leído mejora la experiencia.
Los protagonistas son una banda de punk formada por jóvenes valencianos en los años 80 que, en ese escenario de vorágine alcohólica y psicodélica, consiguen grabar una maqueta de calidad con un productor local. Para celebrarlo acuden a una de las discotecas de moda, un templo construido para el disfrute y el desenfreno donde las drogas provocan sensaciones en los jóvenes valencianos que consiguen borrar los límites con la realidad y permiten la presencia de ciertos entes sobrenaturales.
El otro personaje principal es uno de estos seres que lleva muchos años camuflado entre la población humana (incluso trabaja como policía) y al que no le hace pizca de gracia que su situación tan cómoda se vea alterada por la aparición de competidores.
La historia es muy entretenida y divertida, con un formato episódico que presenta muchos puntos de vista y que consigue que el lector entre en el ambiente psicotrópico y de acción vertiginosa que viven los personajes. Me gusta mucho su estilo narrativo y la forma de presentar y hacer encajar en nuestra realidad a los seres fantásticos.
La historia es muy entretenida y divertida, con un formato episódico que presenta muchos puntos de vista y que consigue que el lector entre en el ambiente psicotrópico y de acción vertiginosa que viven los personajes. Me gusta mucho su estilo narrativo y la forma de presentar y hacer encajar en nuestra realidad a los seres fantásticos.
La música es otro de los protagonistas de la historia. Estoy seguro de que los lectores que sean conocedores de las canciones y los grupos que se mencionan disfrutarán mucho más que yo que, aunque soy coetáneo del autor, era más partidario de un rock clásico que del punk y la música gótica. Como sugerencia, creo que una playlist de las canciones que son nombradas en la novela sería una buena idea.
En fin, que me ha gustado mucho la novela y no puedo hacer más que recomendarla. Es cierto que La Vieja Sangre creo que ofrece una experiencia más completa, ya que el formato de relatos le viene como anillo al dedo a este escenario, pero esta novela corta es un buen punto de entrada a la obra del autor. Hace poco Alfredo publicó en sus redes que tiene algunos relatos más escritos y planeados en este universo, espero que encuentren un buen lugar para ser publicados y que podamos leerlos.
Si todavía no os he convencido, os recomiendo que escuchéis el relato El desahucio, narrado por los responsables del fantástico podcast Noviembre Nocturno, y que forma parte de La Vieja Sangre. Estoy seguro de que despertará vuestra curiosidad.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada