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dimecres, 24 de juliol del 2019

Trilogía de Luna - Ian McDonald

Uno de los libros que estaba esperando con más ganas para leer este verano es Luna Ascendente, la tercera y definitiva parte de la trilogía de la Luna escrita por Ian McDonald. En España la ha publicado NOVA con traducción de Natalia Cervera.
En reseñas y comentarios de las dos primeras novelas se ha comparado esta obra con un culebrón venezolano, con Dune, con Dallas, con el Padrino... y como no, también ha aparecido la inevitable comparación con Canción de Hielo y Fuego. La verdad es que compro la mayoría de estas comparaciones, pero creo que esta vez, la analogía más acertada es la que hace referencia a la obra de Martin. Por varios motivos a nivel de estructura de la novela: la pluralidad de puntos de vista, la evolución de algunos personajes, el uso del sexo, porque la trama se basa en varias familias enfrentadas que buscan el poder y las conspiraciones son un factor muy importante, por el uso de cliffhangers... Ahora bien, los estilos narrativos son totalmente diferentes.
La historia está situada en un futuro cercano en el que la Luna ha sido colonizada por la humanidad. Aunque existe un gobierno lunar controlado desde la Tierra, la LMA, quien realmente corta el bacalao en la luna son los 5 dragones; cinco familias de orígenes diversos que fueron de las primeras colonizadoras y que se han especializado en diferentes ámbitos de la economía lunar: el transporte tierra-luna, la minería, la producción de alimentos... El dragón más reciente es la familia Corta, de origen brasileño y que son los que podríamos considerar los protagonistas principales de las novelas.  Su poder económico se basa en el refinamiento de regolito lunar para recolectar Helio-3 para utilizarlo en la fusión nuclear. 


Un primer aspecto que considero original y que me sorprendió es la elección de los orígenes de las familias dominantes de la luna: Ghaneses, chinos, rusos, australianos y brasileños. Y como estas familias se mezclan por razones políticas y económicas, la población lunar es mayoritariamente mestiza. Estoy acostumbrado a que los europeos y estadounidenses tengan mucho más peso en este tipo de novelas. El racismo ya no se basa en el color de la piel, sino en si eres nacido en la luna o recién llegado de la Tierra, 
El aspecto más destacable de las novelas es la ambientación. La sociedad lunar que presenta McDonald es muy original, una sociedad agobiante (el vacío acecha detrás de cada compuerta) aunque con pocas leyes y en la que todo se puede negociar. Una sociedad en la que se ha de ser concienzudo para poder sobrevivir, pero que es permisiva y distendida a nivel de relaciones afectivas y sexuales. Una sociedad con pocos recursos y espacio en que nada se guarda, todo se imprime y desimprime una vez utilizado. El reciclaje llega a niveles tan bestias que incluye a los cadáveres de los habitantes. El metal es barato y se puede malgastar, el carbono no. 
Los habitantes de la Luna tienen un chip implantado que les informa de sus reservas de los 4 parámetros básicos: agua, aire, carbono y datos. Mantener estos parámetros a niveles aceptables es el principal objetivo de la mayoría de habitantes de la luna, y una preocupación para los más desfavorecidos. Todos los residentes utilizan también un familiar, un asistente informático con avatar personalizados que los demás pueden ver, y que en algunos casos se convierten en un personaje más de la novela. Habituarse a estas dos novedades tecnológicas es uno de los aspectos que más costoso les resulta a los recién llegados a la luna.

En la luna no se ha construido solo para sobrevivir, algunos de los escenarios en los que transcurre la acción de la novela son espectaculares, sobre todo las grandes infraestructuras que las grandes familias han construido por motivos industriales o de prestigio: los pozos de cultivo de los Asamoa, la gran Torre de los Sun que siempre está iluminada por el sol, el gran tren refinería de los McKenzie que circula por la Luna siguiendo la luz solar... Aunque el escenario que más juego da es la superficie lunar, en la que se desarrollan los momentos de tensión más impactantes de la novela: persecuciones al límite de los recursos, luchas con cuchillos, asaltos a estructuras... las escenas de acción son también un punto a destacar de la trama, y hay algunos momentos realmente épicos.
También me han gustado mucho algunos aspectos científicos y técnicos, por ejemplo como resuelve los aspectos fisiológicos de la estancia prolongada en la luna, y las diferencias entre las diferentes generaciones de habitantes lunares, o los efectos de las radiaciones solares y del polvo lunar sobre los habitantes.
La trama es adictiva y emocionante y queda bien resuelta para mi gusto. La recomiendo sin ningún tipo de duda, pero, como es habitual por estos lares, también toca comentar algunos aspectos que no me han convencido del todo.

Como hay tantos personajes y en algún caso poco definidos y se parecen mucho (la única familia en la que todos los personajes están bien dibujados y representados es la Corta), he releído las dos primeras para afrontar la tercera. Creo que el estilo del autor es poco claro, a veces confunde al lector. Algunos aspectos de las conspiraciones políticas y económicas no los detecté claramente en la primera lectura. Puede que sea debido a la estructura de los capítulos, formados por escenas breves y con varios puntos de vista y elipsis temporales importantes. 
A nivel de la trama no me ha acabado de convencer el recurso que en el tercer volumen aparezca un nuevo polo de poder en la luna, la Universidad que está en la cara oculta, que no se ha manifestado en los grandes sucesos que tienen lugar en las dos primeras.

En definitiva: una lectura totalmente recomendable, una de las sagas de ciencia ficción que más he disfrutado en los últimos tiempos. Una historia emocionante, adictiva, con momentos de tensión muy bien calculados en un escenario espectacular, nuestro satélite, utilizado como escenario muchas veces, pero en este caso de forma muy original. 
Aunque la historia queda cerrada de forma satisfactoria McDonald va a publicar una nueva novela corta situada en el mismo escenario, The menace from farside. Cuenta con un lector interesado.

dissabte, 29 de desembre del 2018

Quinto aniversario del blog - sorteo

En unos días el blog va a cumplir cinco años y quiero celebrarlo con vosotros, como es habitual. Me ha resultado realmente difícil este quinto año dedicar tiempo a esta afición. He actualizado muy poco, debido también a que he leído poco. Situaciones familiares y laborales han copado gran parte de mi tiempo y, no se si  será por la edad, cuando me pongo a leer, me quedo dormido a una velocidad supersónica... No he leído ni la mitad de libros que me propuse, aunque estoy contento porque he continuado leyendo en inglés (sin hacer entradas en este idioma, eso si), he releído varios libros que me apetecían, he dejado de lado la tiranía de las novedades (he leído libros con varios años a sus espaldas tapando algunas de mis lagunas en ciencia ficción clásica) y he podido leer la narrativa breve premiada para escribir mi sección para Supersonic. Que no es poco, tal y como están las cosas.

Voy a ser realista y no voy a plantearme grandes retos para el año que va empezar en breve. Mi intención es continuar con el blog, pero me conformo con un ritmo de 2 o 3 entradas mensuales. Hay pocos libros que tenga en el punto de mira como imprescindibles: el final de la trilogía de Luna, de Ian McDonaldExhalation la nueva antología de relatos de Ted Chiang (aunque haya leído varios de los relatos incluidos), el nuevo de Neal Stephenson (aunque no haya terminado su última novela, siempre le doy una oportunidad más a este autor), y Children of ruin de Adrian Tchaikovsky


A nivel de traducciones, espero con ganas las continuaciones de The Expanse y la culminación de la trilogía de NK Jemisin con El cielo de piedra. No estoy muy al caso de lo que va a publicarse en catalán o en castellano, pero siempre hay sorpresas agradables que espero ir descubriendo. Y tengo lecturas pendientes de clásicos, como Ursula K Leguin.

Vamos al grano: como es ya costumbre voy a organizar un sorteo de algunas de las lecturas que más me han gustado este último año. Participar es muy fácil, solo hace falta comentar esta entrada informándonos del libro que más esperáis para 2019 y cual sería vuestra elección en caso de ganar el sorteo.  He intentado hacer una mezcla de géneros, editoriales y géneros de narrativa. El ganador o ganadora podrá elegir entre las siguientes opciones:


La casa de arenas movedizas, de Carlton Mellick III
Pack de Revistas Supersonic (digital): 10, 11 y 12.
Pack de novelas breves (digital): Proyecto Alpha de Caryanna ReuvenUno, de Nieves Delgado y El calígrafo de los cielos, de Ernesto Fernández-Weiss
Estació boira, de Enric Hercé

Tenéis hasta el domingo 6 de enero de 2019 para comentar en esta entrada y así poder participar en el sorteo. Mucha suerte a todos, espero que el 2019 sea un año lleno de buenas lecturas.

divendres, 1 de desembre del 2017

Novedades esperadas para 2018

Como cada año por estas fechas toca la entrada de las novedades esperadas para el año que viene (la quinta de este estilo ya... como pasa el tiempo). Después hago lo que me parece y leo lo que me apetece, pero me gusta organizarme las lecturas, y los habituales ya sabéis que soy un enfermo de las novedades editoriales.
Este tipo de entrada es más fácil hacerla sobre novedades escritas en inglés, aunque este año también voy a hablar de algunas traducciones anunciadas y esperadas. Lamentablemente hay poca información sobre proyectos editoriales escritos originariamente en castellano o catalán. Lo que es seguro es que van a caer varias novelas cortas de la editorial El transbordador y de la editorial Cerbero, como este año, y la antología Alucinadas IV, un proyecto al que tengo cierto cariño. Tampoco voy a dejar escapar las dos antologías que va a publicar simultáneamente Mariano Villarreal: El viento del sueño y otros relatos de fantasía y ciencia ficción y Ciudad Nómada y otros relatos de ciencia ficción contemporánea. También estoy intrigado por la finalización de la serie Crónicas del Fin, escrita a cuatro manos por Gabriella Campbell y José Antonio Cotrina, así que cuando se hayan publicado las dos partes que quedan, será lectura obligada.

La editorial Tor seguro que va a depararnos sorpresas interesantes en su colección de novela corta. Las que tengo marcadas en mi agenda son terceras partes de sagas muy premiadas en los premios internacionales y cuyas primeras partes se van a a publicar en castellano este año: la de Wayward Children de Seanan McGuire (que va a publicar Lee Runas) y la de Binti, de Nnedi Okorafor (que va a publicar la joven editorial Crononauta: mucha suerte). 
Hablando de terceras partes, Ian McDonald va a cerrar su fantástica saga sobre nuestro satélite con Luna: Moon Rising, que con toda seguridad publicará traducida la editorial NOVA. También espero con ganas la conclusión de la saga de Los dioses dormidos, de Sylvain Neuvel, aunque la publicación en castellano de esta saga, debido al cierre de la editorial que publicó el primero, Stella Maris, la veo más difícil.

Este blog no sería el mismo si no comentase un par de novelas de Scalzi cada año. Head on, la segunda parte de la interesante Lock In, está prevista para este año. La cuota de autores asiáticos también la tengo prevista: se va a traducir al inglés Ball lightning, una nueva novela de uno de mis autores favoritos, Cixin Liu. Y tengo curiosidad por ver como se desenvuelve Paolo Bacigalupi con la fantasía con la novela The Tangled Lands, escrita a cuatro manos con Tobias S. Buckell.
Con la ciencia ficción soy más atrevido, pero con la fantasía épica soy más conservador y me centro mucho en autores que ya conozco. Adrian Tchaikovsky está publicando a un ritmo imparable (casi parece Sanderson). Voy a intentar terminar la saga de Echoes of the Fall con su tercera entrega, The Hyena and the Hawk, y voy a estar pendiente del inicio de una nueva saga de estilo Grimdark con la novela Redemption's Blade. También tengo ganas de regresar al universo de Malaz con la conclusión de la saga Path to Ascendancy de Ian C Esslemont, y voy a estar muy atento a la publicación de una nueva saga escrita por Steven Erikson situada después de los sucesos de la saga principal. Y Winds of Winter, claro, aunque voy perdiendo las esperanzas...la he comentado como novela esperada en las cinco entradas que he hecho de este estilo.
En lo referente a traducciones, la cosa promete. Este año he dejado pasar algunas lecturas a las que tenía ganas cuando he sabido que se traducían. Aparte de las que ya he comentado  anteriormente espero con muchas ganas la continuación de la saga The Expanse y El Portal de los Obeliscos, de N.K. Jemisin, publicadas ambas por NOVA. También voy a estar muy atento a las publicaciones de Insolita: El largo viaje a un pequeño planeta iracundo de Becky Chambers y Too like the lightning de Ada Palmer son dos novelas que hace tiempo que tengo en la lista de pendientes. También estoy convencido de que la publicación de la antología de relatos de Liu Cixin The Wandering Earth por parte de Apache va a ser un bombazo editorial.

Revisando la entrada me doy cuenta de que soy un consumidor empedernido de sagas...no me lo esperaba francamente, estaba convencido de que mis hábitos lectores habían cambiado. Veo que la mayoría de libros que estoy esperando este año son terceras partes, así que, para variar, para terminar comentaré el que seguramente espero con más ganas, que es... una cuarta parte de una saga, la de los Ocho Mundos, de John Varley: Irontown Blues, un libro que no tiene nada que envidiar a Winds of Winter en lo que a años de espera se refiere.

Espero que el 2018 sea un año lleno de buenas lecturas. Estad atentos al blog, que en breve publicaré la entrada del cuarto aniversario, con un jugoso sorteo.

diumenge, 19 de març del 2017

Luna: Wolf moon - Ian McDonald (english version)

Disclaimer: English is my third language,  so I want to apologize in advance for there may be mistakes in the text below. If you find any, please let me know so that I can correct it. I'd really appreciate it. Thanks. You can read this review also in spanish here.


Luna: New Moon by Ian McDonald was one of my favorite readings from last year. I was very surprised that it didn't win any of the important awards, but I was much more surprised by the variety of opinions that it gathered among the people I use to share comments with. Oppinions are extreme: you love the book, o you really hate it. 
In my oppinion this second part, Wolf Moon, is even better than the first, altouhgh those who did not like the first probably will not like it and I would not waste time trying,  because the structure and formulla is very similar. But  those who liked the first one will love this second one, because it maintains the virtues of the first, improves some defects, and introduces new  very interesting situations.
I 've read lots of comments comparing Luna with several kind of stories: a western,  a Venezuelan soap opera, and with A Song of Ice and Fire. I decided to qualify it more as a mix between Dune and the Godfather, and I maintain my position after reading  the second part.

The novel has two strong points:  the world-building and the plot. I love the moon that McDonald has created as a scenario, he is able to place us in that relentless habitat very easily presenting a lot of technological, architectural, and energetic details. I really liked how he talks about the physiological differences between people born on the moon and on Earth, and in the difficulty of adapting from one habitat to the other. Another great idea is the four elements that always have to be in green numbers in the account of the inhabitants of the moon: carbon, air, water and data, but it is a pity that it doesn't deepen into how the low classes manage the situation, since, as in the first novel, most protagonists are part of some of the richest families of the Moon, and they do not have these kind of problems. 
There is less presence of sex than in the previous novel, but the variety continues surprising me.
The part of the plot concerning the political and economic conspiracies between the families that have the monopoly over the different resources has interested me as much as in the first one, but the part of the action much more. There are shocking scenes on the surface of our satellite: knife fights, extreme survival, persecutions with Rovers ... very exciting and addictive.
                                  
        Look out!, from here some spoilers of the first novel

It's a very diverse and choral story, with many protagonists who have point of view, which makes it more dynamic, but causes that the plot is not so easy to follow. In the first book I commented that there were many similar characters that could get the reader confused. The fact that many of them died in the first book makes it easier, and some that were secondary become principal in this second book. Although I quickly got back into the story, I think I would have appreciated a little introduction-summary of the facts of the first novel.
The story places us a year and a half after the events with which the first volume ends, and has several parallel plots. On the one hand, it tells us how the younger members of the Corta family are surviving after the attack received by the McKenzie, and on the other hand the hard journey to the Earth by Lucas Corta to try to recover the lost empire. If we add that the McKenzie are going to explode into a civil war and that the governments of the Earth are increasingly interested in being the ones who manage the lunar resources, it raises us a new scenario of intrigue, adventures, and conspiracies that I have devoured with a greater interest than I did with its predecessor.

In short, a second part that I liked the same as the first, but has entertained me much more. Politics, economics, revenge, adventures, and survival in a hostile environment and a spectacular setting. Totally recommended.

dijous, 16 de març del 2017

Luna: Wolf moon - Ian McDonald

NOTA: Actualizo esta entrada debido a la publicación de esta novela en la colección NOVA, con traducción de José Heisenberg.

En vista de la buena acogida que tuvo nuestra entrada conjunta del lunes sobre The Collapsing Empire, de John Scalzi, hoy repetiremos experiencia con la segunda parte de Luna, de Ian McDonald. Es un honor volver a compartir entrada con Leticia de Fantástica Ficción y Antonio Díaz de Sense of Wonder. Creo que hoy coincidiremos más que el lunes. 

Luna Nueva, de Ian McDonald, fue una de mis lecturas favoritas del año pasado. Me sorprendió mucho que no triunfase en ninguno de los premios importantes, pero me sorprendió mucho más la variedad de opiniones que cosechó entre la gente con la que acostumbro a compartir comentarios. Muy poco término medio; o se loan en extremo sus virtudes, o no se soportan sus defectos, y varios de mis compañeros incluso no la terminaron. Aparte del famoso tema de los gustos y los colores, creo que uno de los  problemas principales fue la expectación que se creó sobre la novela, el maldito hype. Sin animosidad voy a colaborar un poco a esta situación comentando que esta segunda parte, Wolf Moon, es incluso mejor que la primera. Aquellos a los que no os gustó seguramente esta tampoco os gustará y yo no perdería el tiempo, porque la fórmula es muy parecida. Pero a los que os gustó, esta segunda parte os va a encantar, porque mantiene las virtudes de la primera, mejora algunos defectos, y introduce nuevas situaciones muy interesantes.
En las diversas opiniones publicadas se comparaba a la novela, con acierto según mi criterio, con un western, con un culebrón venezolano, y con la inevitable Canción de Hielo y Fuego. Yo me decanté más por una mezcla entre Dune y el Padrino, y mantengo mi postura después de la lectura de la segunda parte.

La historia tiene dos puntos fuertes: el world-building y la trama. Tal como McDonald ha planteado la Luna como escenario me encanta, es capaz de situarnos en ese implacable hábitat con mucha facilidad presentando gran cantidad de detalles tecnológicos, arquitectónicos, energéticos... La historia continúa insistiendo en las diferencias fisiológicas entre los nacidos en la luna y en la Tierra, y en la dificultad de adaptarse de una a la otra. Me continúa pareciendo muy original el hecho de los cuatro elementos que siempre tienen que estar en números verdes en la cuenta de los habitantes de la luna: carbono, aire, agua y datos, pero es una lástima que no profundice en cómo lo gestionan las clases más bajas, ya que, igual que en la primera novela,  la mayoría de protagonistas forman parte de alguna de las familias más ricas de la Luna, y no tienen estos problemas. Lo mismo pasa con el uso de las máquinas que imprimen y desimprimen los materiales.
Hay menos presencia de sexo que en la anterior novela, pero continúa sorprendiéndome la variedad. 
La parte de la trama referente a las conspiraciones políticas y económicas entre las  familias  que tienen el monopolio sobre los diferentes recursos me ha interesado tanto como en la primera, pero la parte de la acción muchísimo más. Hay escenas impactantes en la superficie de nuestro satélite: luchas con cuchillo, supervivencia extrema, persecuciones con Rovers...muy emocionante y adictivo.
                                  
                                     Ojo, a partir de aquí algún spoiler de la primera novela

Continúa siendo una historia muy diversa, coral, con muchos protagonistas que tienen punto de vista, cosa que la hace más dinámica, pero provoca que la trama no sea tan fácil de seguir. En el primer libro comenté que había muchos personajes parecidos y que podían llegar a confundir. El hecho de que muchos ya no estén hace más fácil situarse y reconocerlos, y algunos que eran secundarios pasan a tener mucho peso. Aunque rápidamente te vuelves a ubicar en la historia, creo que hubiese agradecido una pequeña introducción-resumen de los hechos de la primera novela. 
La historia nos sitúa un año y medio después de los sucesos con los que termina el primer volumen, y tiene diversas tramas paralelas. Por un lado nos cuenta cómo están sobreviviendo los Corta más jóvenes de la familia (alguno de los cuales se merece una buena colleja) después del ataque recibido por parte de los McKenzie, y por el otro lado el esforzado viaje a la Tierra de Lucas Corta para intentar recuperar el imperio perdido. Si a esto le sumamos que entre los McKenzie va a estallar una guerra civil y que los gobiernos de la Tierra cada vez tienen más interés en ser ellos quienes gestionen los recursos lunares, se plantea una nueva escena de intriga, aventuras, y conspiraciones que he devorado con un interés mayor de lo que lo hice con su predecesora. 

En definitiva, una segunda parte que me ha gustado igual que la primera, pero me ha entretenido mucho más. Política, economia, venganza, aventuras, y supervivencia en un entorno hostil y un escenario espectacular. Totalmente recomendable.

divendres, 24 de juny del 2016

Luna - Ian McDonald

Tenía muchas ganas de leer Luna, la última novela de Ian McDonald publicada por NOVA y con traducción de José Heisenberg. Todas las opiniones y reseñas de gente de cuyo criterio me fío eran MUY elogiosas, y incluso se habló de injusticia cuando se descubrió que esta novela no estaba nominada a los premios más importantes del año.
Las expectativas estaban muy altas, pero todo se desmontó un poco cuando descubrí  el siguiente blurb: "Juego de Tronos en la Luna." Los blurbs no me gustan, así, en general, y este me hizo pensar que a lo mejor la novela no tenía la suficiente entidad para venderse sin compararse con la famosa saga de George R Martin (de la que soy muy fan, por cierto, mi decepción no era snobismo), o que estaban optando por la estrategia comercial fácil.

Luna: Luna nueva (Luna, #1)
Me equivocaba. La comparación es muy acertada, tanto por algunas partes de la estructura general de la historia (la lucha entre familias, los múltiples personajes, los diversos puntos de vista, los giros inesperados y el uso de cliffhangers), como por la sensación placentera que me ha dejado la novela después de acabarla y las ganas que tengo de continuar con la historia. También he visto influencias de Dune (me atrevería a decir que en algunos momentos le hace pequeños homenajes) y de El Padrino. La mezcla genera una historia muy atractiva y adictiva y aunque las influencias son visibles, tiene una personalidad propia muy consistente.
La trama se centra en la historia de cinco grandes famílias, los 5 dragones, que mantienen una lucha por el poder fáctico y económico de la sociedad de la Luna. Cada família tiene un origen geográfico concreto (China, Australia, Brasil...) y está especializada en un sector de negocio (energia, transporte, minería...), pero sus intereses se cruzan y surgen habitualmente conflictos. Los numerosos protagonistas de la trama son principalmente miembros de estas  cinco familias, que se han ido emparejando entre si mediante bodas de conveniencia. 
La trama principal es muy interesante, pero a mi me ha gustado mucho más ir descubriendo los detalles de la sociedad lunar a medida que avanzamos en la historia que no la historia en sí. 
Hay muchos aspectos sociales y tecnológicos a destacar en la novela: el planteamiento de las diferencias físicas y psicológicas de los personajes de las tres diferentes generaciones que conviven en la luna, sobre todo en lo referente a su relación con la Tierra, cómo se resuelven los conflictos y la falta de ley, la estructura social anómala (arriba están los más desprotegidos), las impresoras y desimpresoras, los familiares...hay multitud de detalles muy originales y imaginativos.
Uno de los aspectos que más me ha impactado es el control sobre las cantidades de los cuatro elementos más importantes en la luna y que se tienen que pagar: aire-agua-carbono y datos. Las clases pudientes de la luna no tienen ninguna limitación sobre estos elementos y no le dan importancia a sus marcadores, pero las clases más pobres tienen que hacer lo que sea para que las cifras no lleguen nunca a cero. 
En la novela hay mucho sexo, pero en ningún caso su aparición es gratuita, su variedad sirve para acabar de definirnos a los personajes y su cantidad la interpreto como un carpe diem generalizado debido al enorme riesgo que conlleva la vida en el satélite. Como reza la portada: la luna quiere matarte y tiene mil maneras de conseguirlo.
El estilo del autor me ha encantado; es la primera novela que leo de McDonald, pero no va a ser la última. Para ponerle un pero, diré que no me ha acabado de convencer cómo dibuja a los personajes, no sé si es que no quiere darles tanta importancia como al escenario, o que son demasiados, pero en algunos casos los he encontrado muy parecidos. 
En resumen: una novela totalmente recomendable con una historia muy atractiva y adictiva, con conspiraciones políticas, acción, sexo y en una ambientación espectacular, llena de detalles muy imaginativos. Una de las novelas del año y otro acierto editorial de NOVA. En septiembre se publicará la segunda parte de la trilogía, Wolf Moon, que ha pasado a ser una de las novelas que más espero este año.

diumenge, 29 de novembre del 2015

Meeting infinity - Jonathan Strahan

Hace tiempo que  tenía ganas de probar alguna de las antologías de ciencia ficción del Infinity Project, editadas por Jonathan Strahan

En estas antologías los relatos versan sobre un tema general del posible futuro de la raza humana, desde la colonización del sistema solar, hasta el viaje más allá de las estrellas. En el caso de la recopilación de la que hablaré hoy, Meeting Infinity, el tema central son las modificaciones (culturales, biológicas o tecnológicas) que se podrían llevar a cabo en los seres humanos para poder adaptarse a nuevas condiciones, ya sea en nuestro planeta y en un futuro cercano, como en una posible colonización de un planeta extraño dentro de varios siglos. 

La antología, que ya avanzo que es espectacular, consta de 15 relatos, muchos de los cuales son de nivel muy alto. No los voy a comentar todos, solo los que me han gustado mucho, que, afortunadamente, son mayoría. Hay muchos autores que ya conocía y que acostumbran a ser un seguro; otros autores eran totalmente desconocidos para mi, y han sido sorpresas muy agradables, y hay relatos de otros autores de los que tenía referencias, pero que había leído poco o casi nada.

James Corey en Rates of Change presenta la posibilidad de poder trasplantar nuestro sistema nervioso central a otros cuerpos, que han sido creados artificialmente. El relato también trata de los conflictos generacionales respecto al uso de nuevas tecnologías. Muy interesante, y se me ha despertado el interés por su saga de The Expanse, de la que pronto se estrenará una versión televisiva. Un tema similar, pero con diferente enfoque, es el que presenta Memento Mori de Madeline Ashby. En este caso, además de trasplantar la consciencia, se permite el borrado de recuerdos, de manera que cada vez que cambias puedes volver a empezar. Hay un par de giros en la trama muy sorprendentes.

Yoon ha lee en The Cold Inequalities, nos narra la historia de uno de los vigilantes de una nave que huye de una guerra en la tierra, cargada con las consciencias y recuerdos de millones de seres humanos. La presencia de un polizón desencadena una historia poética y conmovedora.

Nancy Kress demuestra su solvencia con el relato Cocoon. En este caso las modificaciones a los seres humanos son causadas por la infección de un parásito en un planeta que la humanidad está colonizando. El relato, por su temática, desentona un poco respecto a la dinámica general de la recopilación, pero me ha gustado mucho. Aliette de Bodard también utiliza el recurso de una infección de origen desconocido para su In Blue Lily's Wake. El relato, situado en el universo de Xuya, es el típico ejemplo del estilo de la autora: personajes femeninos fuertes de origen asiático, dilemas morales generados por tradiciones estrictas y la presencia de las intrigantes naves, protagonistas de diversos de sus relatos. 
Y para acabar la cuota femenina, otro gran descubrimiento ha sido Gwynneth Jones con Emergence. Un relato con una ambientación interesantísima para enmarcar una historia sobre la longevidad humana y la aceptación de las IA como seres conscientes y con derechos. 


Otro autor que desconocía pero cuyo relato me ha encantado es Sean Williams, con All the wrong places. Y eso que en un principio parece muy repetitivo, pero acaba siendo un relato muy original con toques de ciencia ficción clásica y un punto romántico, ya que la historia trata sobre cómo un hombre persigue a la mujer que ama mientras esta se dedica a explorar el sistema solar, primero, y luego otras estrellas. 
Quiero destacar la gran ambientación que ha conseguido An Owomoyela con su relato Outsider, que narra el encuentro de dos grupos humanos largo tiempo separados y con modificaciones tecnológicas y sociedades muy diferentes. 
No podía faltar la cuota de futuro distópico post-apocalíptico, y en este caso la proporciona Bruce Sterling con Pictures of the resurrection, un relato ácido y pesimista, pero muy interesante, sobre un futuro que espero que no llegue.
Y para terminar el que considero el mejor relato, The Falls, de Ian McDonald, ubicado en el universo de su última novela, Luna, que pronto voy a devorar. El autor mezcla con maestría dos historias, la de una IA que presenta consciencia y sentimientos y la de una madre que vive con temor las aficiones relacionadas con los deportes de riesgo de su hija, nacida en la luna. 

En resumen: Una antología totalmente recomendable, con muchos relatos de calidad y poca cosa a criticar, puede que la distribución de los relatos: entre los cinco primeros hay tres en los que me costó mucho entrar en la ambientación y no me atraparon. A parte de este detalle, muchísimos de los relatos me han dejado con muchas ganas de conocer más de los universos planteados y de sus protagonistas, hecho que tengo en mucha consideración para valorar positivamente una historia breve. He conocido a autores de los que voy a leer más, seguro. Estaré pendiente de la siguiente antología de este proyecto, Bridging Infinity, y intentaré conseguir las anteriores.

Meeting Infinity - John Strahan (English version)

Disclaimer: English is my third language,  so I want to apologize in advance for there may be mistakes in the text below. If you find any, please let me know so that I can correct it. I'd really appreciate it. Thanks. You can read this review also in spanish here.


I've read lots of good reviews  of the anthologies of the Infinity Project, edited by Jonathan Strahan, and finally, I'm able to add my complimentary review.
In these anthologies the stories  talk about a general theme of the possible future of the human race, from the colonization of the solar system, to journey beyond the stars. In the case of the collection of which I speak today, Meeting Infinity, the central theme is the changes (cultural, biological or technological)  that could be carried out in humans to adapt to new conditions, either on our planet and in the near future, or in a possible settlement of an alien planet several centuries in the future.

The anthology consists of 15 stories, many of which are of very high standard. I'm not going to talk about all of them, only about the ones I liked most, which, fortunately, are the majority. There are many writers who I already knew and that I usually like their work; others were totally unknown to me and have been very pleasant surprises.


James Corey in Rates of Change presents the possibility of transplanting our central nervous system to other bodies that have been artificially created. The story also talks about generational conflicts over the use of new technologies. We will find a similar theme, but with a different approach, in Memento Mori by Madeline Ashby. In this case, besides transplanting consciousness, erasing memories is permitted, so that each time you change can start over. There are a couple of very surprising twists in the plot.

Yoon Ha Lee in The Cold Inequalities, tells the story of one of the guards of a ship fleeing a war on earth, loaded with memories and consciences of millions of human beings. The presence of a stowaway triggers a poetic and affecting story.

Nancy Kress demonstrates its solvency with the story Cocoon. In this case the changes in humans are caused by an infection of a parasite on a planet that mankind is colonizing. The story, for its subject, is a bit out of tune respect to the overall dynamics of the collection, but I liked it anyway. 


Aliette de Bodard also uses the resource of an infection of unknown origin in In Blue Lily's Wake. The story, set in the universe of Xuya, is a typical example of the style of the author: strong female characters of Asian origin, moral dilemmas generated by strict traditions and the presence of the intriguing Ships, protagonists of many of her stories.

And, to finish the female quota, another great discovery for me was Gwynneth Jones with Emergence, a narration with a very interesting and detailed setting where the author situates a hearthwarming but raw story about human longevity and the acceptance of the IA as living beings. 
Another author I did not know but whose story I loved is Sean Williams, with All the wrong places. Initially it seems very repetitive, but ends up being a very original story with a touch of classic science fiction and even a little romantic, since the story is about how a man pursues the woman he loves while she is dedicated to explore the solar system, first, and then other stars.

I want to emphasize the great atmosphere of Outsider, by An Owomoyela. It tells the story of the meeting of two separate human groups, and their differences in social and technological aspects.

In this kind of anthologies a story about a post-apocalyptic dystopian future is mandatory, and in this case is provided by Bruce Sterling with Pictures of the resurrection, an acid and pessimistic story, but very interesting, in a future that I hope will not arrive.
And finally what I consider the best story, The Falls, by Ian McDonald, located in the universe of his last novel, Moon, that I will soon devour. The author skillfully blends two histories, one of an AI that has consciousness and feelings and the other of a mother who lives in fear about the sports that practices her daughter, born on the moon.

In short: A fully recommended anthology, with many stories of quality and not much to criticize, maybe the distribution of the stories: in the first five there are three that I didn't enjoy much. Apart from this detail, many of the stories have left me eager to know more about their universes and their protagonists, a fact that I have in  much consideration to positively evaluate a brief story. I have known interesting authors who I will read more, for sure. I will be aware of the following anthology of this project, Bridging Infinity, as well as the three old ones.