Es mostren els missatges amb l'etiqueta de comentaris Julia Sauleda. Mostrar tots els missatges
Es mostren els missatges amb l'etiqueta de comentaris Julia Sauleda. Mostrar tots els missatges

dijous, 1 de novembre del 2018

Alucinadas IV

Tenía preparadas varias novelas para el #leoautorasoct de este año, pero el trabajo y la vida familiar se han interpuesto en mis planes. Había decidido leer las tres novelas del Ekumen que me quedan de Ursula K Le Guin y un par de novelas breves de Aliette de Bodard, pero tendrán que esperar a las vacaciones de Navidad.
La que tenía claro que no podía faltar, aunque no llegue la reseña en octubre (por los pelos), era la antología de Alucinadas de este año, para continuar con la tradición de las tres anteriores. Tengo cierto cariño a este proyecto, aunque a partir de la primera edición, en la que había grandes espadas de la literatura de ciencia ficción femenina, mi sensación era que el nivel del conjunto había bajado. Tengo un par de hipótesis, una relacionada con el gusto compartido (o no) con las antólogas de cada edición, y otra relacionada con el hecho de que cada vez hay más convocatorias de relatos y más escritoras que están publicando narrativa breve, ya que cada vez hay más editoriales y plataformas para hacerlo, y creo que ha de ser difícil poder participar en todas con relatos de calidad.


Reconozco que tenía algunas reservas con las antólogas de esta edición, Iria G. Parente y Selene M. Pascual. Pensaba que el estilo de narrativa que ellas escriben podría influir en el tipo de relatos que se enviasen a la convocatoria, y que seguramente la selección no sería de mi agrado. Mis reservas se acrecentaron al ver la alineación de autoras, de las cuales sólo conocía a tres. Por suerte estaba muy equivocado, el nivel de los relatos es muy alto y coloco a esta cuarta edición al nivel de la primera sin dudarlo. Los relatos son heterogéneos en contenido, estilo y temática, pero muy homogéneos en calidad, cosa extraña en antologías de este estilo. Debo admitir que he echado en falta el relato de Sophia Rhei, que había participado en las tres ediciones anteriores. He tenido que conformarme con el prólogo, menos da una piedra...

Paso a comentar de manera breve aquellos relatos que más  me han llegado, por diversos motivos.

El relato ganador de la convocatoria es Pocas palabras bastan, de Arantxa Comes, una historia cruda y agobiante situada en una sociedad distópica en la que la comunicación entre las personas está tan controlada que sólo puedes utilizar un número determinado de palabras al día. Una mezcla interesantísima de V de Vendetta y la película In Time. Me ha encantado.
Otro relato que quiero destacar basado en un futuro pesimista es Surrosolutions, de Gloria T Daudén, que presenta una mezcla curiosa entre la realidad virtual, la inmigración y la gestación subrogada llevada al extremo. 

Varios de los relatos utilizan a los robots y las inteligencias artificiales como eje principal de la historia, pero con visiones diferentes. Revolución modélica de Coral Carracedo relaciona a los robots con el mundo de la moda y con el paso inevitable de los años y sus consecuencias. Original, pero con  un punto demasiado tierno al final para mi gusto. El tema de la maternidad y los robots es recurrente en historias de ciencia ficción, pero el planteamiento de Haizea Muñoz en Mamá de metal me ha gustado mucho y me ha sorprendido. También quiero destacar en este grupo a In Memoriam, de Irantzu Tato Rodrigo, un relato de tono clásico en el que las memorias que ayudan a personas muy longevas a almacenar sus recuerdos acaban tomando consciencia.

Las ucronías en relato han de ser muy difíciles de plantear, creo que necesitas mucha extensión para presentar los hechos de una realidad histórica alternativa. En Camera obscura Julia Sauleda lo consigue con creces gracias a la figura de una pionera de la fotografia que acompaña al rey Jaume I en la conquista de Mallorca. 
Ahora lo sientes de Andrea Chapela , da el toque philipkdickiano a la antología con la historia de una hacker mental que es capaz de modificar los recuerdos y los pensamientos para que las personas sean capaces de pasar interrogatorios.
El que canta un poco en el conjunto a nivel de temática es Amarás a tu madre por encima de todas las cosas de Elaine Vilar, ya que yo lo calificaría más como un relato de terror que de ciencia ficción. El planteamiento me ha gustado, pero he visto venir la resolución.

En fin, ya habéis visto que es una antología muy variada: robots, inteligencias artificiales, ucronías, distopías... con relatos de mucha calidad y a muy buen precio (3 euros en la edición digital). Os recomiendo que no la dejéis escapar, es una forma excelente de conocer nuevas autoras y puede que algún candidato al Ignotus al mejor relato del año que viene esté entre estas páginas.

dimarts, 30 d’agost del 2016

Alucinadas II

En las redes sociales que frecuento se están abriendo debates y iniciativas interesantes relacionadas con las autoras de ciencia ficción y fantasia (las ganadoras de los premios Hugo, si se publica/traduce/lee suficientemente a estas escritoras, iniciativas para leer durante octubre solo obras escritas por mujeres, grupos en goodreads...). Ahora voy a quedar como un pedante, pero una reflexión interna parecida la hice cuando decidí leer la antología Alucinadas, ya que percibí que en mi lista de lecturas y de entradas en el blog había muy poca presencia femenina. A partir de ese momento, aunque la presencia de autores continúa siendo mayoritaria, sin ser un proceso muy premeditado (si he de ser sincero, intento leer los libros que llaman la atención sin fijarme en el género de quien los escribe) el porcentaje de autoras ha incrementado en las tres lenguas en las que comento en el blog. Continúa siendo un valor bajo, pero vamos mejorando en este aspecto.
El hecho de que hoy comente la segunda parte de esta antología escrita exclusivamente por mujeres no se debe a que este debate esté en el aire, ya que la valoración general no es demasiado buena y corro el riesgo de llegar a ser menos popular de lo poco que lo soy. La primera edición la califiqué con un notable, con algunos relatos muy destacados, incluso uno de ellos, Casas Rojas, de Nieves Delgado, se llevó el Ignotus a mejor relato (de hecho, la antología quedó en segundo lugar en su categoría).

La convocatoria de relatos, por lo que tengo entendido, ha seguido el mismo patrón que en la primera edición, pero la selección ha sido llevada a cabo por Sara Antuña y Ana Díaz en lugar de Cristina Jurado y Leticia Lara.  Es un tópico, pero es cierto: todas las antologías son irregulares y difíciles de valorar en conjunto, pero la sensación general una vez terminada la lectura es que es bastante más floja que la anterior. Hay varios relatos que directamente no me han gustado nada, otros que no me han disgustado pero no dejarán marca, y otros muy buenos que compensan el tono general. Es una mala señal que el prólogo sea mucho más interesante que varios de los relatos que ofrece la lectura de este libro. Paso a comentar aquellos que me han emocionado y me han dejado poso.
En Wirik es Alejandra Degurgez nos plantea un universo en el que los humanos hemos conseguido crear híbridos entre nosotros y los insectos. Prisioneros en una base militar de investigación, tendrán que saber reaccionar a una situación de crisis. Muy interesante cómo en poco espacio es capaz de ofrecer una visión de la sociología de estos híbridos.
La sociedad distópica que presenta Maileis González en Seudo me ha gustado mucho. El protagonista es un ascensorista (modificado genéticamente para que nunca abandone su puesto) en un enorme edificio que incluye una sociedad con diferentes clases y diferentes hábitats en la estructura del edificio. El planteamiento general no es muy original, pero el enfoque si.
En El ídolo de Marte Julia Sauleda nos plantea un punto de vista original a la colonización de otros cuerpos del Sistema Solar: el regreso a la Tierra de las personas adaptadas a estos ambientes. Si a eso le sumamos la presencia de unos extraña raza de marcianos con los que han tenido contacto, queda un relato redondo y muy emotivo. Me gustaría profundizar  más en este universo.
Sofia Rhei es la única autora que repite de la primera convocatoria, y también con un relato relacionado con el lenguaje, Informe de Aprendizaje. Narrado como el informe que presenta una traductora de su experiencia de aprendizaje del lenguaje de una extraña especie de cefalópodos que habitan un planetoide lejano. Muy interesante el planteamiento de las diferencias del lenguaje y del comportamiento de esta especie, y la mala leche que destila al final me ha encantado. De momento todo lo que he leído de esta autora me ha gustado.
El último relato, y que deja buen sabor de boca, es Cuestión de tiempo, de Susana Vallejo. La estructura del cuento es original: narrado como un extensísimo monólogo de una hacker que está drogada y está siendo torturada y interrogada sobre un programa que creó cuando era más joven. Creo que es difícil conseguir narrar una historia compleja y interesante como esta utilizando este recurso, todo un mérito.

En resumen: una antología irregular y con una valoración media no demasiado alta, pero con varios relatos a destacar y alguno  de excelente, que estoy convencido que estará en la lista de nominados de los Ignotus del año que viene. Solo por estos relatos os recomiendo que os compréis el libro, aunque mi valoración global no sea muy buena. La edición digital es una oportunidad que no os podéis perder.