Nota: Actualizo esta entrada del 2015 por la publicación de esta novela en la colección NOVA, traducida por Javier Altayó
Ya he terminado la novela que más esperaba este año, The Dark Forest, de Liu Cixin, y tengo sensaciones encontradas. Estoy realmente contento de comprobar que este fantástico autor chino mantiene el estilo, la garra y la capacidad de sorprendernos de su novela anterior, The three-body problem, y estoy triste porque mi dosis de ciencia ficción con mayúsculas, de momento, se ha acabado. Y es que pocos autores de ciencia ficción me hacen dar tantas vueltas a sus tramas después de la lectura que Liu Cixin.
Ya he terminado la novela que más esperaba este año, The Dark Forest, de Liu Cixin, y tengo sensaciones encontradas. Estoy realmente contento de comprobar que este fantástico autor chino mantiene el estilo, la garra y la capacidad de sorprendernos de su novela anterior, The three-body problem, y estoy triste porque mi dosis de ciencia ficción con mayúsculas, de momento, se ha acabado. Y es que pocos autores de ciencia ficción me hacen dar tantas vueltas a sus tramas después de la lectura que Liu Cixin.
Debo decir que a la trama le cuesta arrancar, el principio no me ha convencido del todo y incluso estaba un poco decepcionado. Tiene un toque oriental muy marcado, demasiado poético, que a veces me desconcierta un poco. Creo que es una cuestión cultural (por no hablar de los nombres, a los que cuando ya me he acostumbrado, el libro casi se ha acabado). La primera novela ya tenía estas características, pero no tan marcadas.
Eso sí, cuando arranca nos presenta unas escenas increíbles, con un gran sense of wonder, giros sorprendentes y una narración muy adictiva. La trama se centra más en la parte de intriga y conspiración que en la parte científica, mucho más asequible que en la novela anterior, aunque siempre presente y imprescindible en la obra de este autor. Tampoco falta el usual desparrame de ideas interesantes y sorprendentes a través de la narración, también típicas del estilo de Cixin. Me ha gustado especialmente que repite muy pocos personajes, y que estos están mucho mejor definidos y caracterizados que en el primer libro, donde los personajes masculinos se confundían.
Cuidado, que a partir de este momento habrá algún spoiler del primer libro, así que si no lo habéis leído (que casi debería ser considerado un pecado) os aconsejo no continuar.
Una vez que la humanidad conoce la amenaza de los Trisolarianos, que llegarán en 400 años, y frente a la constante vigilancia de los Sofones, que bloquean los avances científicos, para sobrevivir sólo queda una alternativa, y es intentar engañar a estos implacables alienígenas. Con este objetivo se nombran a cuatro Wallfacers: personas que dispondrán de los recursos que consideren necesarios, cuya misión será imaginar un plan para vencer a los Trisolarianos, del cuál solo ellas pueden conocer los detalles para evitar que éstos se enteren gracias a sus espías. Para contrarestarlos, los humanos aliados de los Trisolarianos crearan la figura de los Wallbreakers, encargada de averiguar y publicar cada uno de los planes. La historia está centrada en la creación de las estrategias de los cuatro Wallfacers a través de varias etapas temporales, ya que gracias a la hibernación algunos de los protagonistas del Siglo XXI tendrán relevancia en el Siglo XXIII.
Poco más puedo decir sin desvelar algo más de la trama.
Es una novela totalmente imprescindible para cualquier amante de la ciencia ficción: Especulación a nivel científico y social de gran nivel, escenarios y situaciones de acción impresionantes, conspiraciones políticas, giros inesperados en la trama y un final sorprendente y totalmente satisfactorio, que me ha dejado con ganas de más. Lástima del primer tercio, y de que no acaba de perfilar a los personajes importantes, aunque creo que mejora respecto al primer volumen.
En abril de 2016 (que lejos que está...) se publicará la tercera y definitiva parte de la trilogía, Death's End, traducida por Ken Liu. Que larga se hará la espera...
Cuidado, que a partir de este momento habrá algún spoiler del primer libro, así que si no lo habéis leído (que casi debería ser considerado un pecado) os aconsejo no continuar.
Una vez que la humanidad conoce la amenaza de los Trisolarianos, que llegarán en 400 años, y frente a la constante vigilancia de los Sofones, que bloquean los avances científicos, para sobrevivir sólo queda una alternativa, y es intentar engañar a estos implacables alienígenas. Con este objetivo se nombran a cuatro Wallfacers: personas que dispondrán de los recursos que consideren necesarios, cuya misión será imaginar un plan para vencer a los Trisolarianos, del cuál solo ellas pueden conocer los detalles para evitar que éstos se enteren gracias a sus espías. Para contrarestarlos, los humanos aliados de los Trisolarianos crearan la figura de los Wallbreakers, encargada de averiguar y publicar cada uno de los planes. La historia está centrada en la creación de las estrategias de los cuatro Wallfacers a través de varias etapas temporales, ya que gracias a la hibernación algunos de los protagonistas del Siglo XXI tendrán relevancia en el Siglo XXIII.
Poco más puedo decir sin desvelar algo más de la trama.
Es una novela totalmente imprescindible para cualquier amante de la ciencia ficción: Especulación a nivel científico y social de gran nivel, escenarios y situaciones de acción impresionantes, conspiraciones políticas, giros inesperados en la trama y un final sorprendente y totalmente satisfactorio, que me ha dejado con ganas de más. Lástima del primer tercio, y de que no acaba de perfilar a los personajes importantes, aunque creo que mejora respecto al primer volumen.
En abril de 2016 (que lejos que está...) se publicará la tercera y definitiva parte de la trilogía, Death's End, traducida por Ken Liu. Que larga se hará la espera...
Me alegro que este segundo libro siga manteniendo el nivel del primero, con el que disfruté mucho y seguramente sea el mejor libro de cifi que leí el año pasado.
ResponEliminaCon muchas ganas de empezar con éste, aún más después de tu reseña, pero como bien dices, tener que esperar hasta el año que viene para saber como acaba puede ser un infierno! Así que quizá me espere un poco para no sufrir tanto :)
Pues mira, no es mala estrategia tener los dos últimos y poderlos leer seguidos. Gracias por comentar, Aitor.
EliminaComparto tu opinión de que el primer tercio es algo lento, deje en la pila Seveneves de Stephenson por este libro (pobre, le hace falta un buen editor), aunque también estoy leyendo Aurora de Kim Stanley Robinson y también me esta gustando mucho.
ResponEliminaCada día es mas difícil malabarear trabajo, familia y hobbies. En fin, buena reseña.
Los tres son grandes libros que he disfrutado estos últimos meses. A mi el de Stephenson no se me hizo pesado, pero la opinión generalizada es que si. Yo no puedo con tres novelas como estas simultaneamente, me perdería. Gracias por comentar, Jaime.
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